¡Oh no! Los fantasmas se han vuelto a escapar. La misma historia cada Halloween… y Navidad; y Pascua. Cualquier día es una buena excusa para salir a hacer travesuras, o eso piensan los fantasmas del cementerio de Spanta.

 Desde luego, custodiar estas tumbas no es tarea sencilla. Cada noche capturar fantasmas y colocarlos de nuevo en su sitio correcto es realmente agotador ¡Y encima se pintan de colores!.

¿CÓMO SE JUEGA? 

Nos enfrentaremos a los fantasmas que van saliendo del mazo de robo en diferentes rondas. En cada ronda tendremos varias opciones:

Cementerio: revelamos 2 cartas de fantasma por jugador, dando forma a lo que será el cementerio.

Lanzamiento: tiramos los dados . Podemos relanzar hasta 3 veces, reservándonos en cada tirada los valores que nos interese conservar.

Captura: siguiendo el orden de juego, nos turnamos para poner 2 de los dados encima de un fantasma del cementerio. Para ello, la carta debe estar libre y los 2 dados deben de cumplir la condición de colocación que exija la propia carta (números pares, impares, consecutivos, iguales, etc.). Podremos hacer una nueva vuelta hay quien todavía puede poner sus 2 dados restantes.

Mantenimiento: recuperamos los dados y nos llevamos las cartas hemos ganado a la mano

Colocación: Si queremos bajar un fantasma, tenemos que descartar de la mano otro con el que comparta un atributo (forma, color o un comodín). 

Quien consiga más puntos gana.

CONTIENE:

- 72 cartas de fantasma

- 8 cartas de objetivos

- 4 cartas de objetivo especial

- 1 carta de jugador inicial

- 16 dados translúcidos

- 1 reglamento

Nos gusta porque jugando desarrollamos la estrategia, orientación espacial, atención, planificación, resolución de problemas y cáculo.

Recomendado para más de 10 años. 

De 2 a 4 jugadores.